Seguí estos consejos y aprendé a utilizar los electrodomésticos y apliques luminosos de la mejor manera para optimizar el consumo y no gastar de más.
Ahorrar energía no solo contribuye a cuidar el medio ambiente, sino también implica una merma en los gastos que genera la boleta de la luz. Hay varias maneras de cuidar el bolsillo para que la factura no llegue con un elevado precio. Desde apagar las luces que no usamos hasta utilizar de la mejor forma los electrodomésticos que tenemos en casa, todo ayuda para conseguir este objetivo.

En las últimas décadas, el consumo energético aumentó de forma desmedida y muchas veces no estamos atentos a cuántos kw/h consume una casa al mes. La buena noticia es que este problema tiene solución, solo hay que estar atentos a ciertos hábitos y rutinas que hacemos a diario sin darnos cuenta y que son muy simples y fáciles de modificar. Estas pequeñas acciones contribuirán a reducir el gasto eléctrico en el hogar y permitirán un mayor ahorro en la boleta de la luz.

Si uno de los mayores gastos que tenés en tu casa es la boleta de la luz, no hay que desesperarse. Es que con esta serie de consejos sencillos, podrás reducir el consumo y aliviar tu bolsillo. A continuación, una lista de recomendaciones que te ayudará a usar de manera eficiente la electricidad y, sobre todo, a reducir la factura de energía.
Cómo cuidar el consumo de energía
Si querés reducir el uso energético y cuidar los gastos de la boleta de la luz, no te pierdas estos consejos que te ayudarán a no cometer esos errores que cuestan caro. Lo primero que hay que hacer es desenchufar los artefactos que no se utilicen, ya que algunos generan un consumo innecesario por el solo hecho de estar conectados a la red eléctrica. Más allá de que el aparato esté apagado o en modo stand by, igual consume energía. Por otro lado, se recomienda evitar guardar alimentos calientes en la heladera. Lo mejor es esperar a que se enfríen. Es que, al hacerlo, el electrodoméstico deberá trabajar el doble para compensar las temperaturas.

Iluminá la casa con lamparitas led, ya que diferencia de los focos halógenos, estas son más eficientes, no producen calor y son ecológicas. Además, duran mucho más que las bombillas convencionales y su bajo consumo permite un importante ahorro energético. Utilizar la luz natural también contribuye a reducir el gasto energético. Por último, apagar las luces que no usamos supone un importante porcentaje del derroche de electricidad.