Luego de una semana sin comunicaciones la sonda Voyager 2 volvió a reanudar comunicación con la NASA.
Los corazones de los expertos de la NASA se paralizaron el 28 de julio cuando dejaron de recibir información de una de sus dos naves espaciales más longevas: la Voyager 2. Pero después algunos días, la nave volvió a tomar contacto con la Tierra. Todo sucedió cuando el 28 de julio, Voyager 2, que se lanzó desde la Tierra en 1977 y actualmente se encuentra a unos 19.900 millones de kilómetros de la Tierra, perdió contacto con nuestro planeta después del envío erróneo de un conjunto de comandos que hizo mover accidentalmente la antena de comunicación de la nave dos grados.
Si bien el martes último se logró captar una señal de “latido del corazón”, no se podía restablecer una comunicación completa con ella. Según el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA, solo permitió a los controladores de la misión saber que la sonda aún estaba en buen estado. Pero la Voyager 2 está programada para restablecer automáticamente su orientación varias veces al año en caso de problemas como este, aunque la próxima ventana para hacerlo iba a ser en octubre.
Anoche, JPL anunció en una actualización de la misión, que mediante una poderosa antena que pertenece a la instalación de la Red de Espacio Profundo de la NASA en Canberra, Australia, se pudo enviar un comando al espacio interestelar que reorientó la nave espacial y apuntó su antena hacia la Tierra. Los controladores de la misión tuvieron que esperar 37 horas para saber si el comando tuvo éxito. Y así sucedió.