En Bélgica se llevó acabo un atentado terrorista que dejo dos muertos.
Un hombre armado mató a tiros a dos suecos en Bruselas a última hora del lunes, lo que llevó a las autoridades a suspender un partido de fútbol entre Suecia y Bélgica y dejó a más de 35.000 aficionados al fútbol encerrados en el cercano estadio nacional, mientras la capital entraba en su máximo nivel de alerta terrorista con el agresor prófugo.
Los asesinatos se produjeron a unos 5 kilómetros del estadio, según informó el centro antiterrorista belga. El partido se suspendió a la mitad.
Eric Van Duyse, portavoz de la fiscalía federal, dijo a los periodistas que la investigación se centraba en “una posible motivación terrorista del tiroteo”.
“Durante la noche, se publicó en las redes sociales una reivindicación de la autoría, que había sido grabada por una persona que afirmaba ser el agresor. Esta persona afirma estar inspirada por el Estado Islámico”, dijo Van Duyse. “La nacionalidad sueca de las víctimas fue presentada como el motivo probable del acto. Por el momento, ningún elemento indica una posible relación con la situación israelo-palestina”.
Van Duyse no quiso decir dónde podría estar el sospechoso ni si podría haber más de una persona implicada. Dijo que el presunto atacante seguía en libertad.
Los medios de comunicación difundieron vídeos de aficionados en los que se veía a un hombre que llegaba en una scooter con una vasta naranja fluorescente, bajaba del vehículo e inmediatamente sacaba un arma de grandes dimensiones y abría fuego contra los transeúntes. Además de los dos suecos muertos, un taxista local resultó herido, pero su vida no corrió peligro.
Suecia elevó su alerta terrorista al segundo nivel más alto en agosto, después de que una serie de quemas públicas del Corán por un refugiado iraquí residente en Suecia provocaran amenazas de grupos militantes islámicos.