A las múltiples limitaciones que el gobierno le impone a los ciudadanos, se sumaría una más: todos los comentarios de redes sociales serán controlados antes de que se publiquen.
La locura en China por controlar todo y perpetuarse en el poder parece no tener techo. La dictadura disfrazada de comunismo que el país tiene desde hace décadas encuentra reiteradamente formas de someter a la población, con la libertad de expresión como el ítem favorito a limitar.
En esta oportunidad, el gobierno de Xi Jinping tiene preparado un borrador para una Ley en la que se obligue a las plataformas de redes sociales a la inclusión de moderadores de contenidos (a fines a las ideas del gobierno) para revisar todos los comentarios de redes sociales antes de que se publiquen.
Las reglas propuestas también especifican el castigo asociado con las infracciones: los operadores que no cumplan con la regulación enfrentan advertencias, multas y la suspensión de sus funciones de comentarios o incluso la totalidad del servicio.
A su vez, en el escrito también se menciona a orden de que los editores jefes y las redacciones de todos los medios del país sean aprobados por las autoridades comunistas.