
El gigante Evergrande perdió 4.500 millones de dólares en el primer semestre.

El endeudado gigante inmobiliario chino Evergrande anunció una pérdidas de 33.012 millones de yuanes (4.528 millones de dólares) en el primer semestre del año, un 50,4% menos que en el mismo periodo de 2022, cuando perdió 66.400 millones de yuanes (9.136 millones de dólares).
La compañía, que en 2020 había ganado 8.076 millones de yuanes (1.126 millones de dólares), también indicó que al cierre de junio de 2023 su pasivo total alcanzaba unos 2,38 billones de yuanes (327.598 millones de dólares), un 2,02% inferior al del ejercicio anterior, pero alrededor de un 25% más que a finales de 2020.
Las cifras también reflejan un descenso del 5,13% en el valor del patrimonio total de la empresa con respecto al final del ejercicio en 2022, al situarse en 1,74 billones de yuanes (239.231 millones de dólares).
En el primer semestre de 2023, Evergrande, inmersa en una crisis del sector inmobiliario chino que desde finales de 2021 ha sido testigo de una serie de impagos de deuda, facturó 128.067 millones de yuanes (32.084 millones de dólares), lo que representa un aumento del 43% frente al mismo periodo de tiempo en 2022.
Aparte de las pérdidas operativas, Evergrande achacó buena parte de sus resultados negativos a factores como la devolución de terrenos o a la pérdida de valor por deterioro de activos financieros.



