Como parte de su compromiso con la seguridad y la salud de los beneficiarios, el organismo se comprometió a que todas las unidades que se entreguen a partir de septiembre tengan estos sensores.
Mediante una decisión conjunta entre el Ministerio de Planificación e Infraestructura y el Instituto Provincial de la Vivienda (IPV), se ha dado a conocer una iniciativa vanguardista orientada a salvaguardar la integridad de los beneficiarios de viviendas y sus respectivas familias. El propósito de esta novedosa medida es prevenir de manera efectiva las posibles intoxicaciones originadas por la presencia de monóxido de carbono y gas en los hogares.
Bajo la denominación de Resolución 1054/2023, se ha dispuesto que a partir del próximo mes de septiembre de 2023, resultará de carácter obligatorio la incorporación de sensores de detección dual, capaces de identificar tanto el monóxido de carbono (CO) como el gas metano (CH4), en todos los conjuntos habitacionales que sean asignados y en las labores de mejoramiento que se efectúen.
La génesis de esta propuesta encuentra su fundamento en la creciente inquietud generada por los incidentes de intoxicación causados por la presencia de monóxido de carbono en la provincia. Un sinnúmero de estos episodios han culminado de manera trágica debido a la utilización inadecuada de artefactos de calefacción y dispositivos de cocina que hacen uso de gas natural o envasado.
Dentro de este contexto, esta medida no solo busca abordar de manera directa esta problemática de seguridad, sino que también se alinea con las campañas de concienciación que lleva adelante el Gobierno de Mendoza para informar a la población acerca de los riesgos asociados a la exposición a estos gases nocivos.