Se trata de la Casa de Salonia, un espacio que marcó una época en la parte comercial y empresarial del departamento y que desde hace décadas pretendía restaurarse.
Don Francisco Salonia llegó a General Alvear en 1918, procedente desde el sur de Italia. En pleno auge del comercio local, se transformó primero en un gran intermediario entre las empresas foráneas y las locales, para luego ser uno de los más reconocidos de la región. Su participación política y la de su hijo Antonio (quien ocupó cargos en el gobierno nacional) también forman parte de lo mucho que hay para contar de esta familia. El departamento sureño por fin pudo concretar un viejo anhelo, restaurando la casa ubicada en calle Diagonal Carlos Pellegrini.
Este espacio estará destinado a la cultura local y, desde la donación de la propiedad allá por el año 1991 que se deseaba su recuperación y puesta en funcionamiento. Con la presencia de la ministra de Cultura y Turismo, Nora Vicario (además de una gran cantidad de funcionarios) y de ciudadanos en general, el pasado sábado se presentó la obra en sociedad, en una noche llena de sentimientos.
«No hay progreso en los pueblos si no hay educación, cultura, ciencia y tecnología puesta a disposición del progreso material de los vecinos, destinada a mejorar la calidad de vida. Estamos recuperando nuestra historia, nuestra identidad, nuestro orgullo y nuestra cultura, al servicio del desarrollo de General Alvear» comentó el intendente municipal, Walther Marcolini, ante la atenta mirada de Antonio Salonia, quien a sus 95 años pudo ver el sueño hecho realidad.
