Nuestro baño es un refugio personal donde comenzamos y terminamos nuestro día.
El baño es un lugar especial en nuestro hogar. Es por eso, que diseñarlo es una tarea desafiante, pero a la vez que nos dará mucha gratificación. Con una planificación cuidadosa para que quede funcional y estético, pero a su vez, que se ajuste a tu presupuesto es el desafío de hoy.
Primero vamos a empezar por definir cuáles son los objetivos más necesarios para esta remodelación.
Puede ayudarte anotando en una libreta, los principales puntos, como, por ejemplo, que tipo de baño quieres, si es familiar o para una sola persona, si quiere una zona de confort con spa o solo para las visitas, y si es un baño de habitación, principal, etc.
Para planificar la distribución asegúrate que el espacio sea el óptimo para el uso que le vas a dar. La colocación del inodoro, ducha y lavatorio deben estar en un lugar donde sea fácil y cómodo para quien lo use.
Si tienes más espacio podrás incluir una zona más personal, como un tocador o una especial para los maquillajes. No olvides que los espacios para almacenar son importantes, de esta forma se verá ordenado y organizado.
En cada lugar de nuestra casa la iluminación ocupa un diseño único. Combinar las luces para que ese espacio sea agradable, sobre todo en la zona del espejo, y si es posible una entrada de luz natural, sería ideal.
Ahora si vamos por los materiales que le sumaran calidez, como son los azulejos en paredes y pisos. Podrás pensar en conjunto la grifería tanto por lo estético como por la durabilidad de estos accesorios.
Elegir colores suaves y neutros hacen que tu ambiente se vea más relajante. En función de esto será el estilo final que le quieras dar. Quizás elijes un estilo rustico, moderno o minimalista según lo que deseas.
Así como la ventilación adecuada como extractores ventanas de esta forma evitara el exceso de humedad y la aparición de moho
Una vez planificado el baño que sueñas, vamos a ir por buscar presupuestos, este es un factor determinante para la elección de las compras.
Lo ideal es consultar con un profesional para conseguir asesoramiento y a si poder maximizar tu presupuesto.
En fin, el baño perfecto es el resultado de una cuidadosa planificación y diseño. El buen diseño no solo mejora su funcionalidad, sino que también crea un espacio de relajación y comodidad.
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