La piel de las axilas es una de las más olvidadas, al llegar el verano y querer mostrarlas empezamos con dudas de cómo hacerlo.
Acá te vamos a contar que hacer con tus axilas para que las puedas lucir como el resto de tu cuerpo.
Exfoliar tus axilas, así como exfolias la piel de tu cuerpo. Debes acostumbrarte también a incluir en tu rutina a la piel de tus axilas. Lo mejor es hacerlo bajo la ducha, con productos suaves o una esponja natural delicada.
No olvides que la piel de las axilas es muy sensible y que no debes fregar fuerte cuando exfolias. Cuando hayas terminado, enjuaga bien para que el producto y las células muertas se marchen, y termina lavando con un jabón humectante.
Depilarte con productos para piel sensible sea cual fuera el método de depilación que utilices para tus axilas, trata de elegir productos especialmente indicados para pieles delicadas.
Si usas afeitadora, intenta utilizar las que son exclusivas para la mujer. Para no lastimarte tienes que usar una crema de afeitar para pieles sensibles o incluso algo de acondicionador, recuerda siempre enjuagar muy bien. Si te depilas con cera o con cremas depilatorias, busca también la opción “piel delicada”.
Depílate por la noche para que tengan tiempo de reponerse. Durante el día, las axilas están expuestas a la sudoración, las bacterias y los productos químicos de los antitranspirantes, por lo cual, si te depilas por la mañana o la tarde, todos estos factores irritarán y perjudicarán tu piel.
Usa desodorantes hidratantes, gracias a la industria cosmética que ha evolucionado y han creado desodorantes y antitranspirantes que cuidan tu piel con grandes dosis de humectantes.
Blanquear la piel de tus axilas es uno de los puntos más importantes, si la piel de tus axilas se ve oscura tienes mucho para hacer. Por empezar, cumple con cada uno de los tips anteriores para eliminar cada factor que pueda oscurecerlas. En segundo lugar, incluyen jugo de limón, pepinos, bicarbonato de sodio o aceite de coco.
Comienza ahora mismo, sigue estos consejos y obtén resultados antes de que llegue el momento de lucirlas.
