El Lobo cayó en la semifinal ante Estudiantes (BA) y se terminó el sueño del ascenso, al menos por esta temporada. Pero esto no minimiza el gran año del equipo.
Hasta acá llegó la ilusión de pegar el salto. La sensación de que había material como para llegar más lejos es totalmente inevitable. Pero aun así, los más pensantes y los que logren enfriar más rápido la sangre entenderán que lo hecho por Gimnasia en este 2022 es grande. Y que seguramente ha sentado las bases para cosas mayores.
El Lobo quedó eliminado en las semifinales del reducido por el segundo ascenso de la Primera Nacional, al caer en la vuelta por 1 a 0 ante Estudiantes de Buenos Aires (en la ida, el resultado había sido idéntico). El local no supo cómo doblegar el esquema defensivo del visitante, cayó en el nerviosismo y termminó diluyéndose en sus intentos.
Muchos sintieron que este era el momento. Pero, haciendo las cosas como se deben, respetando los procesos; tarde o temprano va a llegar. Tanto Luca Marcogiuseppe como sus dirigidos y también cada integrante de la dirigencia han demostrado sus intenciones de construir un club serio, que pueda llegar para luego mantenerse.