En el debut de la Copa Mundial Femenina, la Selección cayó sobre la hora 1 a 0 ante Italia, realizando un muy buen encuentro.
Dejó una gran imagen, pero no alcanzó. Argentina dio todo ante Italia y se quedó con las manos vacías en el inicio de la Copa Mundial Femenina de la Fifa. Fue derrota 1 a 0, con gol de la histórica goleadora Cristiana Girelli, de cabeza y a sólo tres minutos para completar el tiempo reglamentario. Fue titular la mendocina Estefanía Banini, mientras que Julieta Cruz y Chiara Singarella estuvieron en el banco.
Las dirigidas por Germán Portanova salieron decididas a jugar de igual a igual, a pesar del riesgo que eso conllevaba. Si bien le costó intercambiar golpe por golpe, la presión alta constante incomodó a las italianas, sumando a las aproximaciones que en general empezaban con gambetas de Banini y algunas asociaciones con Florencia Bonsegundo.
Más allá de algunos pasajes en los que tuvo que resistir, el combinado nacional hizo un muy buen segundo tiempo, logrando un par de llegadas de pelota parada y logrando mantener el peligro lejos del arco de Vanina Correa. Sin embargo, ese envío preciso que encontró bien ubicada a Girelli sentenció las chances nacionales a muy poco del final.
En tiempo de descuento, casi llega el empate con un tiro libre de Bonsegundo que pudo contener la arquera Francesca Durante. Más allá del traspié, quedan buenas sensaciones después de enfrentar al que es, en los papeles, el rival más duro del grupo. El próximo jueves 27, a las 21.00 (hora de Argentina) será el turno de medirse con Sudáfrica, que en el estreno cayó 2 a 1 ante Suecia.
